Los olivares intensivos y superintensivos se diferencian de las denominadas plantaciones tradicionales por su alta densidad de plantación. Es decir, se distinguen por el elevado número de olivos que conviven en una misma hectárea de suelo. Así como, por la distribución de los árboles, que se plantan con un solo pie en suelo blando y suelen estar dotados de un sistema de riego por aspersión. Otra diferencia es que, frente a los cultivos convencionales, ofrecen la posibilidad de mecanizar totalmente la cosecha, permitiendo obtener mayores rendimientos productivos gracias a la maquinaria oleícola que se emplea para cada una de las plantaciones.
¿Qué son los olivares intensivos?
Las plantaciones intensivas consisten en olivares aislados, con copas que crecen en forma de vaso, y tienen una densidad de plantación de entre 200 y 600 árboles por hectárea. El marco de la plantación es de al menos 6 metros y la vida útil estimada de este tipo de cultivo es de más de 40 años. Por su parte, los olivares superintensivos; también conocidos como olivares en seto por su característica distribución lineal; poseen una densidad de plantación entre 1.000 y 2.000 árboles por hectárea. Los cuales, se recolectan con maquinaria oleícola en pasillos estrechos. En este caso, la vida útil de estas plantaciones varía entre 12 y 14 años de media.
Este último tipo de plantación está especialmente indicada para las variedades de olivo menos vigorosas, es decir, se suelen seleccionar los árboles que entran en producción antes y que tienen menos tendencia a desarrollar ramas laterales. Entre estas, la más utilizada es la arbequina, aunque cada vez son más populares otras como la arbosana o la koroneiki. La maquinaria oleícola que se emplea en cada uno de los casos es particularmente especifica.
Principales características del olivar intensivo
Desde los años 60, para competir con otros productores mundiales, el olivar enfrentó el surgimiento del cultivo intensivo del olivo. El cual, asegura un mayor rendimiento y una mecanización a partir de la maquinaria oleícola más innovadora. Estos son los factores que caracterizan un olivar de alta densidad o intensivo:
- Densidad de plantación con 250/400 olivos por hectárea.
- Uniformes regulares, generalmente de forma rectangular.
- Sistemas de riego y recolección mecanizada de la aceituna del árbol.
- Alta productividad de aceite de oliva virgen extra por hectárea.
El cultivo intensivo del olivo asegura por tanto una mayor rentabilidad económica respecto a la olivicultura tradicional y un mejor rendimiento. Aunque, la poda se siga realizando de forma manual y la recolección mecánica se limite a una sola planta.
Maquinaria del olivar intensivo
Vibradores de tronco:
- Vibradores acoplados al tractor
- Vibradores autopropulsados
¿Qué es el olivar superintensivo?
El olivar superintensivo lleva 25 años en constante crecimiento, con picos de alta demanda de plantaciones en los últimos 5 años. Su cultivo pretende solucionar los inconvenientes que presenta el desarrollo convencional de marcos de plantación de mayor tamaño, buscando una mayor rentabilidad y en menor tiempo gracias a la maquinaria oleícola que implementa. De todas las hectáreas de olivar plantadas en el mundo, actualmente hay más de 100.000 hectáreas dedicadas al cultivo intensivo. España es uno de los países que más ha evolucionado en este sentido, con cerca de 50.000 hectáreas de plantaciones (el 50% del total mundial).
Teniendo en cuenta las ventajas de este sistema de plantación y a la maquinaria oleícola que utiliza, cada vez son más los agricultores que deciden apostar por el olivar superintensivo, previendo un auge en los próximos años que podría llegar a cubrir hasta el 30% de la superficie olivarera total.
Principales características del olivar superintensivo:
Una de las principales diferencias que ofrece el sistema de plantación de olivo superintensivo, aparte de la maquinaria oleícola que implementa es que tiene una disposición en seto. Generalmente, se trabaja con marcos de plantación de 3 a 4 metros entre calles y entre 1 y 1,5 metros entre olivos. Esto, permite una alta densidad por área, superior a 1500 cepas/ha e incluso más. Sus principales características:
- Cobertura y disposición lineal.
- Distancia entre plantas entre 1 y 1,5 metros, según la variedad elegida y su tamaño.
- Distancia entre hileras de 3 a 3,5 metros, para permitir la entrada de máquinas en poda y recolección.
- Altura máxima del olivo de 2,5 metros y tamaño tal que no cubra una anchura superior a 80 cm.
- Fuerte producción a partir del 2º y 3º año, con producciones superiores a los 12.000 kg/ha a los pocos años del establecimiento.
Ventajas principales:
Una de las principales ventajas de los olivares superintensivos son las magníficas producciones que se obtienen pocos años después de la plantación y esto en parte, ciertamente, gracias a la maquinaria oleícola que se usa. Esto, permite un retorno de la inversión muy rápido. Otro beneficio interesante es la reducción de mano de obra. Ya que, muchas de las tareas que habitualmente se realizan en los olivares convencionales se sustituyen por maquinaria oleícola. Desde la recolección hasta la poda o cualquier tipo de elaboración, se realiza con maquinaria automatizada, pues es una garantía de éxito productivo.
Entre las principales consideraciones para tener en cuenta en el olivar superintensivo está que se deben considerar los parámetros de plantación y, por supuesto, la maquinaria oleícola respectiva. Por ejemplo, con marcos de plantación muy altos (superiores a 1.600 cepas/ha) existe riesgo de sombra y dificultades para obtener rendimientos suficientes por aceituna. Esto, se corrige estudiando la orientación de cada parcela, siendo la orientación Norte-Sur (NS) la más habitual y la más adecuada.
Maquinaria oleícola para olivar superintensivo
Podadoras
Cosechadoras de olivar:
- Cosechadoras de aceituna arrastradas
- Cosechadoras de aceituna autopropulsadas
- Lavadoras de aceitunas